¿Existe alguna relación entre un jugador de póker y un entrenador de fútbol sala?
Creemos que sí, y vamos a demostrarlo.
El póker es un juego tremendamente estratégico, donde existe también un factor de suerte importante aunque también relativa, según probabilidades. Existen muchos juegos de póker gratis donde poder jugar actualmente, como por ejemplo la plataforma pokerstars. Como bien conocemos el fútbol sala es probablemente uno de los deportes donde la estrategia tiene mucha importancia, vamos entonces a buscar relaciones significativas.
Siempre hemos oído que un partido de fútbol sala puede ser como una partida de ajedrez, pero a partir de hoy vamos a decir que es como una partida de póker.
En el mundo del póker existen 4 tipos de jugadores: los agresivos (aquellos que lo juegan casi todo), los conservadores (sólo se arriesgan si están casi seguros de ganar), los súper agresivos (aquellos que lo juegan todo si o si) y los dispuestos a jugar 2 cartas cualquiera (los suicidas).
¿Qué tipo de entrenadores existen en fútbol sala? Podemos encontrar a los conservadores (aquellos que no quieren arriesgar mucho), los agresivos (aquellos que mentalizan a sus equipos para el ataque y presión constante) y los mixtos (aquellos que según el rival son conservadores o agresivos). Vemos pues, que no difiere mucho el tipo de jugador y el tipo de entrenador.
En función del tipo de jugador de póker y en función del tipo de entrenador, se plantea un partido o partida (definido como estrategia de inicio), de gran importancia, ya que puede marcar el resultado final.
En el póker es muy importante saber “leer la mesa”, este concepto puramente estratégico, consiste en identificar no sólo como juegan los jugadores de la partida, sino también como jugar tus cartas en función de variables como: la posición de la mesa, la cantidad de fichas del rival, la cantidad de fichas en juego, la cantidad de fichas mías, etc. Una buena lectura de la mesa nos puede dar partidas. En el fútbol sala tenemos una situación muy parecida, el entrenador debe ser capaz de “leer el partido”, en función de muchas variables como: el planteamiento del rival, el resultado, el tiempo, el planteamiento propio, los jugadores, incluso por factores externos como el arbitraje o el ambiente. Nuevamente, vemos la relación entre póker y fútbol sala.
Un buen jugador de póker también es aquél que sabe “leer y analizar su mano”, ya que no solo es importante saber leer la mesa, sino es más importante saber si tu mano puede ser ganadora.
Un buen entrenador de fútbol sala debe saber “leer y analizar su equipo”, saber qué jugadores pueden realizar unas tareas concretas, saber el estado de estos jugadores, y extraer el 100% de cada uno.
Para poder ganar tanto una partida de póker como un partido de fútbol sala, el entrenador o jugador deben de tener en cuenta: el tipo de jugador/entrenador, saber leer la mesa o el partido y saber leer y analizar tu equipo o mano. Dominando estos 3 conceptos, tenemos muchas cosas ganadas… 3 puntos o quizá 1.000 fichas.